CÓMO ELEGIR EL ERP ADECUADO PARA SU EMPRESA
Opinión de Leo Bensadón, director general de Infor Iberia.
Para los fabricantes, el ERP no es lujo sino una necesidad si quieren gestionar el negocio de forma más eficiente y rentable. De ahí la criticidad de elegir el más adecuado para su organización.
Muchos de los ERPs que hoy en día se utilizan han sido creados en base a modelos empresariales de los años 90 y haciendo especial hincapié en las áreas financieras, gestión de órdenes y compras. Sin embargo, las nuevas tendencias del mercado, los nuevos modelos de negocio y la aparición de tecnologías disruptivas como el Cloud, la conectividad social o los dispositivos móviles, junto con el crecimiento incesante de la complejidad en el seno de las organizaciones, fuerzan a los fabricantes a buscar sistemas más operacionales.
Con la tecnología adecuada, los fabricantes pueden ‘domar’ la complejidad, adaptarse al cambio y dar soporte a la innovación. Fallar en esta decisión provoca que el ERP en vez de ser parte de la solución se convierta en un problema. El reciente estudio IDC Manufacturing Insights, muestra que el 34% de los fabricantes considera a “los sistemas de TI inadecuados o poco efectivos” como la principal barrera para alcanzar la excelencia operacional.
Tomar la decisión adecuada exige el input de muchos departamentos y considerar los siguientes aspectos:
¿Qué se quiere lograr?
La estrategia de ERP debe estar en consonancia con la estrategia empresarial global. En primer lugar, es clave reconocer lo que afecta al negocio, identificar los objetivos para la empresa, comprendiendo qué aspectos necesitan mejorarse. Por último, es clave considerar cuáles son las principales iniciativas que cumplen con estos objetivos, y aplicarlo a un ERP.
¿Qué es lo que necesita del ERP?
Según un estudio de Aberdeen Group, los dos criterios de selección más importantes son la funcionalidad y facilidad de uso.
Elegir un ERP basado en cómo gestiona su negocio es fundamental. ¿Cómo se puede simplificar y acelerar sus procesos críticos de negocio y escalar a medida que su empresa crece? Personalizar o incorporar funcionalidades extra pueden ser opciones costosas que, a la larga, pueden afectar a futuras actualizaciones.
En lo que se refiere a facilidad de uso, es importante buscar cuadros de mando de fácil uso (o “mash-ups”), que proporcionan una navegación común e información concisa y basada en roles. La encuesta de IDC indica que los ERP que ofrecen estos espacios de trabajo mejoran las capacidades de toma de decisiones, aumentan la productividad, y reducen la complejidad.
Pero tampoco conviene olvidar que…
La integración es a menudo un reto importante y costoso para cualquier CIO. El ERP tiene que integrarse sin problemas con otras aplicaciones a fin de conseguir que los datos fluyan por la organización y que proporcione una mayor visibilidad de lo que ocurre en el negocio.
Cada negocio tiene sus propios procesos y que el ERP debe ser compatible con el modo de fabricación
Las industrias tienen sus propias peculiaridades- los requisitos de producción, suministro, y la contabilidad de una empresa farmacéutica son muy diferentes a la de un fabricante de maquinaria- por ello, es imprescindible encontrar un ERP que atienda estas diferencias y soporte toda la normativa legal.
Los actuales sistemas ERP ofrecen muchas opciones para su despliegue. Un modelo on-premise requiere un fuerte departamento de TI, capaz de gestionar las actualizaciones y seguridad de los datos, mientras que un modelo de despliegue en la nube o de software como servicio podría ponerse en marcha más rápidamente y reducir los costes iniciales.
¿Cuál va a ser su precio?
El coste real de un ERP implica el precio de compra inicial y el coste total de propiedad (TCO). Aberdeen Group lo define como una combinación de los costes de los esfuerzos, recursos, implementación, licencias de software, integración y mantenimiento y soporte. Cuanto menor sea la inversión necesaria para estas actividades, menor será el coste total de propiedad.
¿Cómo elegir el proveedor?
El ERP es una inversión importante, así que es recomendable asegurarse de elegir el proveedor adecuado. Para ello, es importante tener en cuenta su solidez financiera, la estabilidad de la organización, su historial de servicio al cliente y la lista de clientes satisfechos.
La relación debe centrarse en la obtención de valor y resultados para el negocio, fruto de los servicios y soporte que ofrezca el proveedor para maximizar el valor de los sistemas. Así, un factor clave para fabricantes internacionales es que la empresa cuente con una gran dispersión geográfica de oficinas y que ofrezca líneas de soporte 24×7.
Pero es que además, en un entorno tremendamente cambiante, es importante proteger esta inversión buscando un proveedor con un claro compromiso con el desarrollo de soluciones que atienden a formas futuras de trabajo. Por ejemplo, ¿cuál es la estrategia móvil del vendedor, o cómo aprovecha las aplicaciones de las redes sociales?
En definitiva, al elegir un ERP, tenga en cuenta que no es sólo software. Piense diferente y tenga en cuenta cómo trabaja, sus objetivos de negocio y la capacidad global del proveedor, pues sólo así le será de ayuda a la hora de alcanzar la excelencia operativa y competir mejor en su industria.
Fuente: http://www.muycomputerpro.com/2012/10/11/elegir-erp-adecuado/